Joshua, ¿De qué lado estás?

Tienes 17 años y tu madre acaba de morir de una sobredosis. Lo primero que te pasa por la cabeza es llamar a tu abuela y perdirle si te deja a ir a vivir con ella, aunque casi no la conoces. Lo que no sabes, o sí, es que tanto ella como tus tres tíos están implicados en un sinfín de negocios ilegales. Este es el argumento de 'Animal Kingdom', la opera prima del australiano David Michôd.

Aunque me da la sensación de que en España está pasando un tanto desapercibida, estoy convencido de que se convertirá, para mí ya lo es, en una de las grandes películas del año. Recientemente, se llevó el Premio del Jurado en el Festival de Sundance, que no es poco. Miro hacia atrás y quizás es lo mejor que he visto desde la inquietante 'Canino' (2009), candidata al Oscar como mejor película de habla no inglesa. ¡Cómo me alegro!

Hace unos días que pienso en ella y sigo buscando el adjetivo que mejor la defina... ¿Seca? ¿Inquietante? ¿Verosímil y nada efectista? La verdad es que se me hace imposible decantarme por sólo uno. Lo que tengo claro es que la película, con mucha violencia implícita -y poca en pantalla-, no dejará indiferente a nadie. Es dura como una patada en el estómago, pero recomendable al ciento por ciento.

El joven que se queda huérfano es Joshua, que se encuentra entre la espada y la pared. O es fiel a su familia, con una matriarca capaz de hacer cualquier cosa por sus hijos, o se decanta por la de su novia, formada por personas aparentemente normales. Mezclar sus dos mundos puede convertirle en cóctel molotov ambulante. El papel de la mamma, realmente espectacular, corre a cargo de Jackie Weaver, a la que creo nunca había visto hasta ahora.

El único actor 'conocido' de 'Animal Kingdom' es Guy Pearce, que da vida a uno de los pocos policías no corrompidos que caminan por las calles de Melbourne. ¡Una película impresionante!

'EL DISCURSO DEL REY'

'El discurso del Rey', de Tom Hopper, es la película con más nominaciones para los Oscar. Son doce, entre ellas las de mejor director, mejor actor principal y mejores actores de reparto. Uno de ellos, Colin Firth, que interpreta al Rey Jorge VI, ya ha ganado el Globo de Oro. Haga lo que haga, siempre le recordaré, con su jersey de lana, con un ciervo gigante estampado, en 'El diario de Bridget Jones'.

También son cadidatos, Helena Bonham Carter (Reina Elizabeth) y Geoffrey Rush, que interpreta a Lionel Logue, el terapeuta de transtornos del habla que acabó con la tartamudez del Rey. Los dos están sublimes. Además de ser Barbosa en la saga de 'Piratas del Caribe', el australiano ya brilló en 'Shine' (1996), ganando el Oscar al mejor actor principal. Guy Pearce hace de Eduardo VIII, que abdica en favor de su hermano para poder seguir viéndose con una mujer casada.

Más allá del reparto, que es sensacional, 'El discurso del Rey', basada en hechos reales, es de aquellas películas que dejan huella. Nos explica la relación entre Jorge VI y su terapeuta, con constantes estira y afloja. Pasan de una posición de claro 'dominio' de uno sobre el otro, a la amistad verdadera; alternando fases de colaboración y de broncas. Viven en mundos distintos, como también lo son sus casas. La del Rey, llena de personas y de cosas, frente a la del terapeuta, grande pero con las paredes desconchadas y casi vacía.

Es una película bonita, emocionante, con un Rey que tiene que humanizarse al máximo y superar sus miedos para acabar con una tartamudez que le castigaba desde pequeño. Está siendo uno de los grandes éxitos de taquilla de la temporada. Si se puede ver en versión original, mucho mejor. El inglés que usan los protagonistas principales, ricos, pobres y en el caso del terapeuta, de origen australiano, son muy diferentes.

Buena semana a todas y a todos.

El agua es vida (y lucharemos por ella)

Dicen que la historia sirve para aprender del pasado y no cometer los mismos errores en el futuro. Puede que así sea, aunque en ‘También la lluvia’, Icíar Bollaín nos explica todo lo contrario. Quinientos años después del descubrimiento de América, los fuertes siguen aprovechándose de los débiles. Nada ha cambiado. La única diferencia es que ahora se enfrentan por el agua y no por el oro.

‘También la lluvia’, con 13 nominaciones a los Goya, será, sin lugar a dudas, una de las grandes películas de este 2011. Y no sólo en España. Critica abiertamente el imperialismo, el colonialismo y, por si fuera poco, la falta de escrúpulos de las multinacionales. Es cine social del bueno, con una historia fuerte (o dos, en este caso) y un gran nivel interpretativo, con Luis Tosar (que el año pasado recibió el Goya por 'Celda 211', Gael García Bernal y un inmenso Karra Elejalde a la cabeza. Imprescindible.

Una productora cinematográfica se desplaza a Bolivia para hacer una película sobre Cristóbal Colón (Elejalde) y el descubrimiento de América. Se instalan en este país, en la ciudad de Cochabamba, porque es el uno de los más baratos y con mayor población indígena de Hispanoamérica. Quieren contratar a unos cuantos actores secundarios y a los extras pagándoles lo mínimo. El director es Sebastián (García Bernal) y el productor, Costa (Tosar). La idea es mostrar a Colón como un hombre ambicioso y sin escrúpulos.

'DANIEL', CENTRO DE LA POLÉMICA

Juan Carlos Aduviri es Daniel, el líder de los indígenas de la película. Se da la circunstancia de que también es el cabeza visible del pueblo boliviano, que toma las calles para protestar por la privatización del abastecimiento del agua municipal por parte de una multinacional extranjera. Este hecho, que es verídico al ciento por ciento, ocurrió en el año 2000. Que Daniel se meta en problemas puede provocar que no pueda rodarse con normalidad.

Quinientos años después, Daniel y los suyos vuelven a ser 'colonizados'. Las piedras y los palos es lo único que tienen para enfrentarse al nuevo ejército, bien armado, con perros y sin ningún tipo de prejuicios. Por cierto, el final, con un valor altamente simbólico, es francamente bueno. Hacía tiempo que no salía de un cine tan satisfecho.

'THE GREEN HORNET'

Dirigida por el gran Michel Gondry ( 'Rebobine por favor', 'La ciencia del sueño') y 'Olvídate de mí'), ‘The Green Hornet' descoloca. ¿Por qué? Pues porque es una película de acción sin tregua, de aquéllas -y si no al tiempo- que arrasará en los cines y, sobretodo, en los videoclubs. Nada que ver con los anteriores trabajos del director. Yo la fui a ver en 3-D, un sistema que, una vez más, me decepcionó. A mi hijo le gustó.

El protagonista principal es Seth Rogen ('Hacemos una porno', 2008). Se ha hecho una película a su medida porque también es guionista y productor de la misma. Él es Britt Reid, un joven que sólo vive para divertirse. Cuando se muere su padre, él hereda su imperio periodístico. Ha llegado la hora de cambiar... o no.

Como que su vida ha sido siempre un juego, prefiere hacer de superhéroe enmascarado y seguir dando la espalda a la realidad. Y lo hace enfrentándose a los villanos más poderosos de la ciudad. Su ayudante es Kato (Jay Chou), un experto en artes marciales
y 'creador' de un coche que es todo un arsenal.

Sin ser nada del otro mundo, la película, que dura dos horas, se deja ver. Tiros, tiros y más tiros y un malo muy simpático, interpretado por Christoph Waltz, Oscar por su grandísimo papel en 'Malditos bastardos' (2009). Aquí hace una caricatura de sí mismo brutal.

Buena semana a todas y a todos.

Si puedo elegir, me quedo con el original

En pintura, en escultura y en cualquier otra disciplina artística, siempre que pueda elegir, me quedo con el original. No estoy de acuerdo en que “una buena copia sea mejor que un mal original”, como deja entrever el protagonista masculino de ‘Copia certificada’, la última película del iraní Abbas Kiarostami. A James Miller le interpreta un gran William Shimell.

Precisamente, el papel de Shimell y, sobretodo, el de Juliette Binoche (premiada como mejor actriz en el Festival de Cannes) son lo mejor de ‘Copia certificada’, que recibió la Espiga de Oro en el Festival de Valladolid, ex-aequo con ‘Sin retorno’, de Miguel Cohan. La película me ha parecido dispersa y tremendamente presuntuosa. Nada es creíble. Nada se acerca a la realidad que, directa o indirectamente, conocemos todos.

Tanto Elle como James hablan y hablan, por no decir que filosofan, sobre cualquier cosa, por intranscendente que sea. Nadie en la calle se expresa como ellos. Nadie se hace tantas preguntas en tan poco tiempo. Por suerte, las cosas son bastante más sencillas. Elle y James se encuentran en un pequeño pueblo italiano del sur de la Toscana y mantienen una conversación, apenas sin parar, desde que empieza hasta que acaba la película. No hay más.

SIN UNA BASE SÓLIDA

Salvando las distancias, la historia que nos explica Kiarostami me ha recordado a ‘Antes del amanecer’ (1995), para mí más redonda y sensible que ésta. Aquí todo está construído sobre una base como de ‘cartón piedra’, aunque tengo claro que las cosas tienen doble sentido y que no hay que interpretarlas al pie de la letra. Elle es una galerista francesa. James un escritor inglés. Acaba de publicar un libro con el mismo título de la película. En principio parece que ambos no se conocen de nada, pero no es así. Y no explico más para no desvelar los pocos ‘secretos’ que esconde el argumento.

Una vez vista la película, intento dar marcha atrás (para volver a analizarla desde el principio) y nada me cuadra. ¿Hasta el hijo de Elle forma parte de este intento de ‘reinventarse’ a si mismos? Al igual que con las obras de arte, en las relaciones personales, y sobretodo de pareja, me quedo con el original, por muy buena que sea la copia. Esto de reinventarse a uno mismo no acabo de verlo claro.

A otros bloggers cinéfilos, como por ejemplo Bargalloneta, Babel o Roger, les gustó mucho más que a mí.

Buena semana a todas y a todos.

¿Por qué nos engañamos a nosotros mismos?

No siempre somos como parecemos. Y es que, a veces, la realidad puede sorprender a propios y a extraños. Vemos a alguien de una manera determinada y, al final, puede acabar siendo diametralmente opuesta. Los remordimientos, la culpa y la búsqueda de uno mismo pueden tener mucha culpa de ello. De esto y de otras cosas parecidas nos habla la película 'Quid pro quo', dirigida por el debutante Carlos Brooks.

Se estrenó en 2008 y, si no recuerdo mal, pasó por las carteleras sin hacer demasiado ruido. Eso sí, después de tener una buena acogida en el Festival de Sundance. Yo he vuelto a verla esta semana y, la verdad, creo que vale la pena. 'Quid pro quo' ('algo por algo') nos cuenta la historia de Isaac Knott (Nick Stahl), un periodista radiofónico que va en silla de ruedas.

Knott va detrás de una noticia soprendente: hay un grupo de personas, sumidos en un mundo extraño y oscuro, que han decidido vivir sentados en sillas adaptadas, a pesar de no tener ninguna discapacidad física. ¿Por qué lo hacen? ¿Qué ventajas tienen? ¿Por qué son capaces de dejarse amputar una extremidad sana? ¿Detrás puede haber complots médicos o administrativos?

VERA FARMIGA SE LUCE

La mujer que pone a Knott sobre la pista de estos paralíticos 'artificiales' es la sensual Vera Farmiga, nominada como mejor actriz de reparto por su papel en 'Up in the air' (2009). Aparentemente, ella, que da vida a Fiona Ankani, tamnbién se siente más cómoda en silla de ruedas que andando por sí misma. ¿O no es así? ¿Quizás está intentando que Knott reflexione sobre algo de su pasado? ¿Se conocen de ahora o quizás su primer encuentro no ha sido casual?

Todas estas preguntas quedan respondidas en 'Quid pro quo', una película diferente. Y, hoy en día, para mí, si es diferente e intenta aportar algo nuevo, ya es mucho. Os la recomiendo.

Buena semana a todas y a todos.